De vez en cuando una receta... La tlayuda es una “tostada gigante” típica de Oaxaca, la
tradicional es untada con manteca.
foto: kiki-art blog
Ingredientes
200 g de carne de res
150 g de mole especial o picoso (pasta)
150 g de asientos de manteca
4 tlayudas (que conseguiremos en un mercado cercano a nosotros)
2 tazas de frijoles refritos
400 g de queso Oaxaca deshebrado
2 aguacates
Cebolla en rebanadas
Jitomate rebanado
Lechuga fresca
Salsa
Preparación
1. Primeramente vamos a disolver la pasta del mole en caldo de pollo caliente.
2, En otro sartén asamos cebolla con aceite y cuando la cebolla esté transparente, agregamos el mole disuelto y lo dejamos hervir a fuego lente, debe quedar espeso.
3. Se fríe la carne de res en un poco de la manteca, se retira y se fríen los frijoles que pueden machacar o licuar para que queden más líquidos.
4. Con estos frijoles y el asiento de la manteca se cubren muy bien las tlayudas, luego los trocitos de res se colocan arriba.
5. Se coloca un poco de mole sobre la carne y los frijoles, sobre esto se va poniendo el queso oaxaca, el aguacate en rebanadas, la cebolla, el jitomate y la lechuga fresca, ya lavada y desinfectada.
6. Se agrega salsa al gusto... ¡ya está lista para disfrutarse!
Las cualidades nutricionales de la carne de polloson tantas, que su frecuente recomendación por nutriólogos y médicos en general, la ha vuelto un ingrediente básico con combinaciones y modos de preparación infinitos como la creatividad de los expertos en la cocina, a los que bien algún día podríamos imitar animándonos a experimentar con lo que tengamos en nuestras alacenas…
Pero, si al igual que yo, tienes un poco de miedo de experimentar y fracasar en el intento, te invito a practicar preparando la receta anterior que, además de las ventajas de pollo, también nos brinda algunos nutrientes propios de las carnes rojas y del vinagre.
Y como ya es costumbre, te comparto una canción de uno de mis cantantes favoritos para que ambientes tu cocina mientras preparas tus alimentos…
Si hablamos de México, ¿qué es lo primero que se son viene a
la mente?, obviamente su gran riqueza gastronómica, y es que es inevitable no
probar algún platillo mexicano y no dejar de pensar en que quieres volver a
comer dicho platillo, así es la comida mexicana, es como el amor a primera
vista, solo al oler unos ricos sopes que van llegando a tu mesa, acompañado de
unos ricos guisados, lechuguita, cremita, salsita, quesito… ya hasta se me hizo
agua la boca.
Así que mejor te dejo
esta rica receta para que tú prepares
unos ricos sopes en la comodidad de tu hogar:
1.Mezcla la harina de maíz con el agua tibia en un
tazón mediano y amasa hasta que quede muy bien integrada. Si es necesario
agrega más agua, pero poco a poco, de cucharada en cucharada, hasta que la masa
esté suavecita y muy manejable. (La masa tiene que quedar suave pero no
pegajosa). Algunas veces la humedad del área donde vivimos hace que nuestra
masa quede aguadita; si este es tu caso, agrégale un poquito más de harina de
maíz. Cubre la masa con una servilleta de tela húmeda para evitar que se seque.
2.Divide la masa en 10 bolitas del mismo tamaño y
cúbrelas de nuevo con la servilleta de cocina.
3. Calienta el comal a temperatura media alta
4. Corta la
bolsa de plástico en dos cuadros iguales. Coloca una pieza de plástico en la
tortillera y pon encima una bolita de masa; cubre con el otro pedazo de
plástico y cierra la tortillera presionando suavemente la agarradera para
formar una tortilla gruesa de tamaño mediano.
5.Abre la tortillera y remueve el plástico de
arriba. Levanta la tortilla sosteniendo el plástico de abajo y voltea la
tortilla de manera que quede en la palma de tu mano (parte de la tortilla
deberá cubrir tu mano y otra parte deberá colgar de ella).
6. Coloca la
tortilla en el comal caliente con un movimiento rápido. En cuestión de un
minuto voltea el sope a que se cocine por el otro lado. (No lo dejes cocinar
mucho tiempo porque se secará la masa). Vuelve a voltear a que se cocine por otro
minuto. Da una última volteada que será de 20-30 segundos de cocción aprox.
Retira el sope del comal con la ayuda de una palita y colócalo en una
servilleta de cocina para mantenerlo calientito. Déjalo enfriar solamente unos
45 segundos y entonces empieza a formar el borde pellizcando las orillas con
tus dedos. Regresa el sope a la servilleta, y continúa cocinando los demás.
Para Servir:
1. Calienta el aceite o la manteca de puerco en un sartén (o
en un comal). Coloca los sopes en el sartén y fríelos ligeramente durante 30
segundos por cada lado; ese será tiempo suficiente para calentarlos y que se
doren un poquito. Retira los sopes del sartén y ponlos en un plato cubierto con
toallas de papel para que absorban el exceso de grasa.
2. Ahora sí, a ponerle los frijolitos, la carne de tu
preferencia, la lechuga y cualquier otro ingrediente que hayas seleccionado
como relleno o guarnición. Sírvelos con salsa a tu gusto.